Hábil para escapar de las autoridades, el Manayo, un veterano pandillero que bajo amenazas a muerte exigía el pago de la extorsión a los comerciantes de la cabecera de Cojutepeque y San Cristóbal, municipios del paracentral departamento de Cuscatlán, además de ordenar asesinatos, fracasó hoy con su velocidad al caer abatido por unidades combinadas de la Policía y el Ejército que los descubrieron en uno de sus escondites.
Moisés Antonio López Avalos de 25 años, cabecilla de la clica Indios LS de la MS, cayó muerto empuñando una escopeta recortada, sobre la vereda por donde horas antes había sido visto dirigirse a su casa situada en la periferia del casco urbano de San Cristóbal.
A primera hora de este viernes, se supo de la presencia de varios sujetos a una zona de abundante maleza y árboles que linda con la casa del ahora fallecido, por lo que de inmediato las patrullas de la Fuerza Especializada de El Salvador (FES) y del Grupo Conjunto de Apoyo (GCAP) se desplazaron al sitio para montar el plan de vigilancia y captura del pandillero.
Desde el interior de la vivienda, el terrorista detectó a los captores en una dirección opuesta de donde fue captando más temprano el grupo de sujetos, por lo que decidió escapar por esa vía aprovechando la abundante vegetación, pero se topó con los otros agentes que ya advertían que esa sería su ruta de escape, contra los que abrió fuego con el saldo antes apuntado.
Redacción FES PNC
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